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Más Abrazos // Miércoles 20 Mayo, 2020 // #embarazo, #cuidados, #salud
La preeclampsia es una enfermedad grave que puede afectar a la madre y a su bebé y afecta cerca del 7% de los embarazos.
Esta condición usualmente ocurre durante la segunda mitad del embarazo, después de la semana 20, y está caracterizada por presión arterial alta y signos de daños en otro sistema de órganos, más frecuentemente el hígado y los riñones.
La preeclampsia tiene el efecto de reducir el flujo sanguíneo a la placenta. Si el bebé no recibe suficientes nutrientes y oxígeno a través de la placenta, se evita el crecimiento.
Esta complicación es un tema serio, ya que puede desencadenar complicaciones graves, incluso mortales, tanto para ti como para tu bebé.
De hecho, si la preeclampsia no es detectada a tiempo, puede transformarse en eclampsia.
La eclampsia es una enfermedad grave que en algunos casos raros puede ser mortal.
Por eso, es muy importante que estés bien informada sobre qué es, cuáles son las causas y los síntomas, cómo tratarla y cómo prevenirla.
A continuación, te mostramos algunos datos clave sobre la eclampsia y cómo prevenirla:
Si bien la causa exacta de la preeclampsia todavía no se ha podido determinar con exactitud, las principales causas están relacionadas con el desarrollo deficiente de los vasos sanguíneos durante el embarazo, lo cual limita la cantidad de sangre que puede fluir por ellos.
De igual modo, ciertas hipótesis afirman que existe mayor riesgo de presentar preeclampsia si:
Sobre los síntomas, debes saber que a veces la preeclampsia es silenciosa.
La preeclampsia necesita de un tratamiento inmediato, de modo que es primordial que sepas detectar los síntomas a tiempo y monitorees tu presión arterial con frecuencia para notar cualquier signo de alerta.
Presta atención y contacta inmediatamente a tu médico si presentas alguno de los siguientes síntomas:
Las señales son dolores de cabeza intensos, visión borrosa u otras alteraciones visuales, dolor intenso en el abdomen o dificultad para respirar grave.
En este momento debes visitar inmediatamente a tu doctor. Sin embargo, debes estar en constante monitoreo y realizarte las pruebas rutinarias pertinentes.
Las principales causas de la preeclampsia están relacionadas con el desarrollo deficiente de los vasos sanguíneos durante el embarazo, lo cual limita la cantidad de sangre que puede fluir por ellos.
Lo que puede influir en esta formación anormal, comprende lo siguiente:
Una vez que sabes qué es la preeclampsia y las causas de esta complicación, ¿existe una manera de prevenirla? Los investigadores continúan estudiando formas de prevenirla, pero hasta ahora no han surgido estrategias claras.
Comer menos sal, cambiar tus actividades, restringir calorías o consumir ajo o aceite de pescado no reduce el riesgo. No se ha demostrado que un aumento de la ingesta de vitaminas C y E sea beneficioso.
Si tienes ciertos factores de riesgo, que incluyen antecedentes de preeclampsia, embarazo múltiple, presión arterial alta crónica, enfermedad renal, diabetes o enfermedad autoinmune, el médico puede recomendarte una dosis diaria baja de aspirina (81 miligramos) a partir de las 12 semanas de embarazo.
En algunas poblaciones, las mujeres que tienen deficiencia de calcio antes del embarazo, y que no obtienen suficiente calcio durante el embarazo a través de sus dietas, podrían beneficiarse de los suplementos de calcio para prevenir la preeclampsia.
Con esto hemos llegado a la conclusión del artículo de hoy. Recuerda: Cuídate y cuida a tu bebé con atención prenatal temprana y periódica. Si la preeclampsia se detecta a tiempo, tú y tu médico pueden trabajar de la mano para prevenir complicaciones y tomar las mejores decisiones para ti y tu bebé.
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